"Cuando el desencanto se ha convertido en artículo de consumo masivo y universal. Nosotros seguimos creyendo en los asombrosos poderes del abrazo humano" Eduardo Galeano.

domingo, 22 de junio de 2008

Mari Mari

Hola a todos y todas.
Estamos en el Año Nuevo ranquel, que coincide con el solsticio de invierno. Acá decimos ranquel, ya que los hermanos de los pueblos originarios de esta provincia, La Pampa, se reivindican en su mayoría como tales: rankülches, gente del carrizal, descendientes del pueblo Mamülche, gente de los montes; en otros lados usarán el más multiétnico término "mapuche", que cubre diversas parcialidades territoriales. Hace unos dos años tuve el honor de ser invitada, con otras compañeras y compañeros de la clase de lengua, historia y cultura ranquel, a la ceremonia o nguillatun que se llevó a cabo en Leuvucó, cerca de Victorica, en el lugar donde descansan ahora los restos del cacique Mariano Rosas (Panguitruz Gnër), para esta fecha. Los restos de Mariano Rosas les fueron devueltos después de que se rescataran del Museo de La Plata (donde tenían la triste función de ser expuestos como objeto de estudio antropológico, de un individuo de una raza "rara", seguramente inferior para algunos, seguramente "merecedora" de ser casi exterminada...)
Después del día más corto del año, punto culminante del invierno, en que la vida descansa y se retira a las entrañas de la tierra, a buscar las fuerzas para resurgir en la próxima estación (a la que empezamos a encaminarnos) en las semillas que brotarán, en las hojas que nacerán, en los animales que se aparearán, ... allí comienza, en el hemisferio sur, como seis meses más tarde sucederá en el hemisferio norte, el nuevo año, el que tiene que ver con el inicio de un nuevo ciclo en la naturaleza, y no con las nueces y el lechón que con suerte comeremos en pleno verano, fuera de toda lógica.
Por eso comparto este saludo ranquel que envió una amiga (más aplicada que yo en recordar las palabras adecuadas):

Mari Mari Peñí Lamnguen
We Wiñoy Tripantu
Ka peu ka toio

En nuestro idioma:

Mari Mari (saludo) Hermanos, Hermanas
Buen Año Nuevo
Otra vez nos veremos

Celebración ranquel
nulpún nentutuingün taiñ tapül
katruingün traiñ chañin
lupum manguetuín taiñ mutrún
vei nu pepilaingün nutatí langün taiñ volil

Arrancaron nuestras hojas
cortaron nuestras ramas
quemaron nuestros troncos
pero no pudieron nunca matar nuestras raíces


(Declaración de los kuivikeché del país, en un travün (encuentro, reunión) de comunidades indígenas, en 2003.
Traducción al rankül: maestro rankülche hablante de la lengua Daniel Cabral

Cariños, Ana

Diego Sachella la presenta asi: Ana es una militante pampeana por los DDHH y me envío algo cuya belleza es deseable compartir.