¿Cómo? , ¡Fácil!, yo propongo arrancar por buscar esas fotos, esos libros, esos cuadernos, esas cartas olvidadas en algún rincón, papeles, documentos, que hayan pertenecido a los abuelos; juguetes, estampitas, todo sirve y vayan colocándolos en una caja que diga “Recuerdos de familia” (pongan el apellido a cada cosa, en algún lugarcito) y ténganla en su casa, siempre a mano; cada familia una caja, o dos, o tres, o cien. Después con la caja bajo el brazo, si es una, va a ser más sencillo transportarla, nos vamos a visitar a algún pariente o amigo y comenzamos a sumar cajas, recuerdos, anécdotas… y vamos agrandando archivos, y nos reencontramos… y el árbol crece, como dice María Guebara, Nada es más hermoso que treparse a nuestro propio árbol genealógico, los invito a leer las entradas de María en La Gallineta, quizá leyéndola a ella, comprendan lo que quiero decirles, María es su copueblana, yo inauguro la partida de nacimiento que amablemente me extendió Miguel, paso por acá me tomo unos amargos con ustedes y preparo mis cajas para acercárselas a Marilu.
Un nombre… una foto y desatamos la búsqueda, ¿y éste quién es?, ¿hermano de quién?, ¿casado con quién?, Van aparecer cosas, que quizá, no nos guste recordar, pero es la vida, instante único y maravilloso por el que solo se pasa una vez y ¡sí, que vale la pena!
Y si tienen un grabador a mano y un cassete vayan a conversar con los más viejos y les piden que cuenten sus vivencias, hagan preguntas para que los abuelos puedan recordar, rotulen el cassete, Nombre del entrevistado, fecha y hora de la entrevista, edad del personaje, y si pueden transcriban la charla. Y sigan sumando.
Pregunten por ejemplo ¿quién?, en el pueblo recuerda, cuando en 1938 la “Productora Pampa Film” entró, con sus vehículos por la flamante Ruta Nacional Nº 2 para filmar en la Estancia La Quinua, por entonces propiedad de Olegario Ferrando, una película que convocó a los actores mas destacados del momento. El pueblo todo participó, yo puedo darles el nombre de la peli, pero no sirve, los invito a que lo descubran, investiguen. Cuando tengan todos los datos, podríamos pedirle al Instituto Nacional de Cine, a través de la Dirección de Cultura, una copia y verla todos juntos y descubrir a nuestros familiares actuando, y para que vean que digo la verdad, aquí va una foto, al ampliarla podrán leer en la puerta del vehículo “Pampa Film”.
Un nombre… una foto y desatamos la búsqueda, ¿y éste quién es?, ¿hermano de quién?, ¿casado con quién?, Van aparecer cosas, que quizá, no nos guste recordar, pero es la vida, instante único y maravilloso por el que solo se pasa una vez y ¡sí, que vale la pena!
Y si tienen un grabador a mano y un cassete vayan a conversar con los más viejos y les piden que cuenten sus vivencias, hagan preguntas para que los abuelos puedan recordar, rotulen el cassete, Nombre del entrevistado, fecha y hora de la entrevista, edad del personaje, y si pueden transcriban la charla. Y sigan sumando.
Pregunten por ejemplo ¿quién?, en el pueblo recuerda, cuando en 1938 la “Productora Pampa Film” entró, con sus vehículos por la flamante Ruta Nacional Nº 2 para filmar en la Estancia La Quinua, por entonces propiedad de Olegario Ferrando, una película que convocó a los actores mas destacados del momento. El pueblo todo participó, yo puedo darles el nombre de la peli, pero no sirve, los invito a que lo descubran, investiguen. Cuando tengan todos los datos, podríamos pedirle al Instituto Nacional de Cine, a través de la Dirección de Cultura, una copia y verla todos juntos y descubrir a nuestros familiares actuando, y para que vean que digo la verdad, aquí va una foto, al ampliarla podrán leer en la puerta del vehículo “Pampa Film”.
¡Nos vemos! Por que ya lo dice el refrán “El que toma mate vuelve”