Hay en el Blog de TN y la gente un comentario que llega desde Mar del Plata con nombre, apellido y dirección. Explica que llegó hasta allí por casualidad… y observa “se pelean entres ustedes y dejan comentario anónimo y eso no sirve. Si realmente le interesa su pueblo pongan nombres y apellido… chicos trabajen en conjunto”
" Somos si alguien nos mira" Y volvemos al tema ¿Quién soy yo para opinar?; en “los Guidos” madie, no existo, pero aquí, si puedo hacerlo.
Muchos de los comentaros vertidos por algunos jóvenes Guidenses muestran enojo reprimido que se ha vuelto culpa… por eso no dan sus nombres y apellidos. Muchos de los que participan parecen no dimensionar la gravedad de la denuncia, otros se preguntan si era necesario llegar hasta aquí. Y los francotiradores, que los hay en todas partes, intentan matar al mensajero. No escuchan, no se escuchan, no hay diálogo posible. Y no dan nombre ni apellido, por prevención, la mayoría trabaja en el Municipio, o debe favores. Hablan de las comparsas, de los corsos… Pero no todos piensan así: Reproduzco un e-mail que recibí unos días atrás de un habitante de Guido.
... es muy doloroso lo que está pasando... no respetan a nadie ni a nada... por eso entendía que no podía participar de un lugar del cual la mayoría desconoce las reglas de juego... todos hemos sido insultados (o muchos, al menos...) pero bueno, así estamos... ayer recibí un mail que plantea muy bien esto de la intolerancia
"Por cómo percibimos y acogemos a los otros, a los diferentes, se puede medir nuestro grado de barbarie o de civilización.
Los bárbaros son los que consideran que los otros, porque no se parecen a ellos, pertenecen a una humanidad inferior y merecen ser tratados con desprecio o condescendencia. Ser civilizado no significa haber cursado estudios superiores o haber leído muchos libros, o poseer una gran sabiduría: todos sabemos que ciertos individuos de esas características fueron capaces de cometer actos de absoluta perfecta barbarie.
Ser civilizado significa ser capaz de reconocer plenamente la humanidad de los otros, aunque tengan rostros y hábitos distintos a los nuestros; saber ponerse en su lugar y mirarnos a nosotros mismos como desde fuera...” Tzvetan Todorov al recibir el Premio Príncipe de Asturias
No es parte de nuestro problema?, No refleja claramente lo que nos pasa?... claro que Todorov habla así en relación al conflicto israelí palestino... pero me parece que describe en general nuestro mal como sociedad.
…sigue Todorov: "El etnocentrismo consiste en el hecho de elevar, indebidamente, a la categoría de universales los valores de la sociedad a la que yo pertenezco." El conflicto está tan lejos o tan cerca como el lugar en el que vivamos y estén nuestros afectos, como encendamos los televisores, o salteemos la página del periódico. Tan lejos o tan cerca como nuestras creencias, o que querramos que nuestros niños crean, y cómo querramos que aprendan a justificar sus actos, vindicar sus ofensas, reclamar sus derechos.”
Liliana espero, sinceramente, esto amaine!
Ojalá así sea, ojalá pronto la pileta del Polideportivo esté siendo reparada. Ojalá haya diálogo.