IX Romance apocalíptico
la noche se ha fracturado
la noche se ha vuelto incierta
y por la puerta entreabierta
la noche se ha penetrado
: salgo a la noche y afuera
el cielo se ha bifurcado
lo sigo por desgarrados
suburbios por las postreras
callejas y más callejas
las que mueren en los campos
extrañas son las estrellas
extraños suenan los cantos
de los pájaros penúltimos
casas viejas viejos ranchos
adobes rojas esquinas
y grietas en las endrinas
paredes y el yuyo adentro
la noche ha tornasolado
ochavas y sin ochavas
faroles candiles yertos
más allá la ruta antigua
más allá los sitios muertos
los paredones al tiempo
y el curso hacia el infinito
los pantanos y los miasmas
la luz mala los fantasmas
de gauchos putas y farras
de indios de gliptodontes
de trilobites primeros
de mar en el mar hundido
de magma en costra fundido
de pronto resucitados
legiones y más legiones
de espectros huestes enteras
son las mesnadas primeras
desde el alga a las postreras
voces que ayer escuchamos
todas juntas conjugadas
conjugándose al no olvido
y desde el sur han partido
hacia aquí por recordarnos
su propia muerte en la muerte
porque muerte es la presencia
que por la puerta entreabierta
supe hoy la propia muerte
la muerte del pueblo entero
ya no acacias no ciruelos
el yermo será la suerte
de la memoria y el fuego
torna a su centro primero
rescoldo que prisionero
se ha liberado por siempre
en llamas arden las puertas
los rostros las tumbas todo
dioses prohombres el lodo
del amor del odio el légamo
ardiéndose en alarido
mejor aún en silencio
los cielos estremecidos
y esta historia que se ha muerto.
Juan Carlos Sanchez Sottosanto
http://sanchezsottosanto.over-blog.es/
la noche se ha fracturado
la noche se ha vuelto incierta
y por la puerta entreabierta
la noche se ha penetrado
: salgo a la noche y afuera
el cielo se ha bifurcado
lo sigo por desgarrados
suburbios por las postreras
callejas y más callejas
las que mueren en los campos
extrañas son las estrellas
extraños suenan los cantos
de los pájaros penúltimos
casas viejas viejos ranchos
adobes rojas esquinas
y grietas en las endrinas
paredes y el yuyo adentro
la noche ha tornasolado
ochavas y sin ochavas
faroles candiles yertos
más allá la ruta antigua
más allá los sitios muertos
los paredones al tiempo
y el curso hacia el infinito
los pantanos y los miasmas
la luz mala los fantasmas
de gauchos putas y farras
de indios de gliptodontes
de trilobites primeros
de mar en el mar hundido
de magma en costra fundido
de pronto resucitados
legiones y más legiones
de espectros huestes enteras
son las mesnadas primeras
desde el alga a las postreras
voces que ayer escuchamos
todas juntas conjugadas
conjugándose al no olvido
y desde el sur han partido
hacia aquí por recordarnos
su propia muerte en la muerte
porque muerte es la presencia
que por la puerta entreabierta
supe hoy la propia muerte
la muerte del pueblo entero
ya no acacias no ciruelos
el yermo será la suerte
de la memoria y el fuego
torna a su centro primero
rescoldo que prisionero
se ha liberado por siempre
en llamas arden las puertas
los rostros las tumbas todo
dioses prohombres el lodo
del amor del odio el légamo
ardiéndose en alarido
mejor aún en silencio
los cielos estremecidos
y esta historia que se ha muerto.
Juan Carlos Sanchez Sottosanto
http://sanchezsottosanto.over-blog.es/